Vivimos en tiempos donde la esperanza, el animo y la tranquilidad escasean tanto como la harina pan y la buena voluntad de los políticos, en menores o mayores escalas e intensidades, pero ninguno se salva. Hoy escuchando a Luis Carlos Diaz, palabras más palabras menos, dijo que las crisis debían ponerse en botellas para poder verlas desde afuera; y en mi botella mental solo pude ver desesperación: nuestra palabra clave del día de hoy, pero ¿como se refleja eso? Hablemos del venezolano de a pie, nosotros: terminando el domingo pensando que mandara la MUD y a cuanto llegara el kilo del pollo para esta semana, enredado entre los grupos de whatsapp y las noticias de DolarToday... que se meten en la Asamblea, que Maduro declara la guerra, que Ramon Muchacho convoca protesta por instagram, que explotaron el TSJ, que el CICPC se alzo... ¡calmao pueblo que se les queman las arepas! Claro, si son lo suficientemente afortunados para tener un plato en sus mesas y las pastillas necesarias para e
por Oriana Gonzalez Villarroel.